Crónica de una muerte anunciada: tras las obras de mejora de la charca de Zeluán

en el pasado otoño, no se abrió la entrada de agua marina, por lo que era esperable que la sequía del verano hiciese secarse la charca y volver a colonizarse de vegetación, justo lo que está ocurriendo (ver foto).

Hicimos el tradicional censo estival de acelga salada Limonium vulgare en el estuario avilesino (ver imagen de flores). Salió un número similar al del pasado año, con solo 2 ejemplares en la Ensenada de Llodero.

De aves acuáticas no hay novedades reseñables (ver fotos de Mauricio): cormorán

moñudo, garza real, garceta común, chorlitejo grande, zarapito trinador, archibebes común y claro, andarríos chico, gaviotas reidora, cabecinegra y sombría.

De pajarinos, Mauricio ve 2 pollos volantones en la pareja de alcaudones

dorsirrojos (ver foto suya). Hacía mucho tiempo que no criaba esta especie por el estuario. El mismo autor retrata un verderón (ver foto suya).

Los aviones roqueros son curiosos a la hora de usar sus nidos: los utilizan unos años y luego los abandonan, a pesar de estar en buen estado. Una nueva ubicación tiene ahora pollos a punto de volar (ver foto).