Se suele decir que hay gente que tiene suerte porque suelen ver muchos bichos de interés. Pero la suerte hay que buscarla, y cuantas más
veces salgas al campo, más cosas interesantes verás. Esta mañana durante solo unos minutos, estuvo en la Ensenada de Llodero 1 pagaza piquirroja adulta (ver fotos). Es la cuarta cita de la especie en el estuario avilesino.

Además hubo entrada de más limícolas: 3
ostreros en la Ensenada, y en la bocana nada menos que 31 correlimos tridáctilos vio el compañero Fran Baena. Con ellos, los primeros correlimos oscuros. Entre las gaviotas, hay 1 gavión que lleva tiempo por aquí (ver foto).

Pero también hay movimiento de pajarinos. Fran vio los primeros pinzones (5 ex, también en la bocana), y por la ría cada vez se notan más los petirrojos foráneos. Por otra parte, las cornejas siguen agrupadas en un bando por Zeluán. Diferenciar la edad por su plumaje no es fácil. Gracias a la ayuda de los colegas del GIA y, sobre todo, de Alex Onrubia, podemos distinguir a la mayoría de los ejemplares. Y es que el proceso de muda y desgaste puede dar a error. Los jóvenes tienen ahora el plumaje bien, con un leve tono pardo, mientras que los 1º veranos son una amalgama de plumas viejas echas polvo (pardo-cobrizo, ver foto), y los adultos pueden estar en varias fases: plumaje perfecto (ver foto) o mudando (fijarse en las viejas rémiges externas de la foto). Además, hoy había otra a la que le faltaban un montón de rémiges (ver foto), y creo que podría ser un 1º verano.